Emerson lanza el nuevo analizador de oxígeno in situ Rosemount™ CX2100, diseñado para proporcionar la información crítica necesaria que optimiza los procesos de combustión y ayuda a los fabricantes a cumplir las normas de emisiones, reducir los costos de energía y aumentar la seguridad. Este tipo de analizadores se usan en una variedad de industrias, incluyendo energía y servicios generales, química y petroquímica, celulosa y papel, petróleo y refinación, metales y minería, entre otras.

Los analizadores de oxígeno existentes para procesos de combustión tienden a ser difíciles de instalar, comisionar y mantener, lo que dificulta la optimización de los procesos de combustión. Por el contrario, el CX2100 es fácil de instalar, con un amplio rango de accesorios para diferentes condiciones de proceso, incluyendo aplicaciones de alta temperatura, altas partículas y alto azufre. El transmisor puede montarse a una distancia de hasta 91 metros (300 pies) de la sonda, lo que simplifica aún más la instalación, especialmente importante para la seguridad del personal.

El comisionamiento del CX2100 se agiliza por la función de configuración y comisionamiento guiado de la interfaz del operador local, con soporte para siete idiomas. La interfaz tiene botones táctiles capacitivos, ofrece una amplia variedad de opciones de personalización y está alojada en un compartimento metálico resistente que proteie su electrónica interna. La configuración guiada también puede hacerse por medio de un host remoto, como un sistema de control o de gestión de activos.

El mantenimiento es fácil gracias a la función de conexión/desconexión rápida de la sonda, lo que acelera el reemplazo al eliminar la necesidad de volver a cablear. Los difusores de cerámica o Hastelloy proporcionan una larga vida útil que protegen la sonda de la degradación en condiciones de alta temperatura y son reemplazables en el campo.

Las funciones de autocalibración y verificación de autocalibración miden regularmente la precisión del analizador, lo que ayuda a liberar tiempo de los técnicos para tareas de mayor valor y mejora la seguridad al asegurar que el analizador se mantenga dentro de sus límites de calibración. La seguridad se mejora aún más con un interruptor de seguridad contra llamas que apaga automáticamente el calentador de la sonda cuando se detecta una llama.