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Jueves, 18 de Abril de 2024
 
Repsol invertirá 657 M€ para ampliar su complejo industrial en Sines, Portugal
 
REPSOL | Se instalará una planta de polietileno lineal y otra de polipropileno, con tecnologías líderes en el mercado y las primeras de su tipo en la Península Ibérica. Las plantas estarán operativas en 2025.
 

 

Repsol construirá en su Complejo Industrial de Sines (Portugal) dos plantas de materiales poliméricos que representan la mayor inversión industrial en Portugal en los últimos diez años por valor de 657 millones de euros. Los nuevos materiales producidos son 100% reciclables, al igual que el resto de las poliolefinas de Repsol, y podrán utilizarse para aplicaciones de elevada especialización y alineadas con la transición energética en la industria farmacéutica, automotriz y alimentaria. Las instalaciones estarán operativas en 2025 y convierten al Complejo Industrial de Sines en uno de los más avanzados de Europa por su flexibilidad, elevado grado de integración y competitividad.

 

El proyecto cuenta con una planta de polietileno lineal (PEL) y otra de polipropileno (PP), con una capacidad de 300.000 toneladas anuales cada una. Las tecnologías de ambas plantas, que garantizan la máxima eficiencia energética, son líderes en el mercado y las primeras de su tipo que se instalarán en la Península Ibérica.

 

Situado en una localización privilegiada, el Complejo Industrial de Sines contará además con nuevas instalaciones logísticas, incorporando la posibilidad de uso del ferrocarril. Así, se optimizará la conexión con el mercado europeo reduciendo la huella de carbono del transporte de los productos.

 

La ampliación del Complejo Industrial de Sines aumentará las sinergias del área industrial de la compañía. Además, contribuye a que Repsol avance en su objetivo de tener una petroquímica más integrada y diversificada, con productos de mayor valor añadido.

 

El nuevo proyecto de inversión ha sido diseñado para acompañar los objetivos de Repsol de ser una compañía cero emisiones netas en 2050 y se encuentra alineado con la estrategia del Acuerdo de París. El gobierno portugués ha considerado esta inversión de Potencial Interés Nacional y ha concedido incentivos fiscales por un valor de hasta 63 millones de euros.

 

Durante la fase de construcción, se prevé la generación de una media de 550 empleos directos e indirectos, con un máximo de más de 1.000 personas. Una vez en marcha, el aumento neto de personal será de unos 75 puestos directos y unos 300 indirectos. Todos ellos de personal altamente cualificado.