FCC Aqualia afianza su posición en América Latina, con estos nuevos contratos: dos en México y otros dos en Chile. Las adjudicaciones valoradas en 108 millones de euros y logradas a través de su filial Aqualia Infraestructuras, consolidan la diversificación de la compañía y afianzan su posicionamiento en ambos países, en los cuales ya ha desarrollado importantes trabajos en los últimos años.
El proyecto de Cutzamala (México), valorado en 60 millones de euros, consiste en el aumento de una línea más en su sistema de abastecimiento, que garantizará el agua potable a la zona periférica de la Ciudad de México. En la actualidad es el más grande de Latinoamérica.
FCC Aqualia, en alianza con el grupo Hermes Infraestructura, construirá durante los próximos dos años y medio una conducción de acero de 2,3 metros de diámetro de 18 kilómetros.
Por otro lado, la corporación mexicana Pemex, a través de su filial Pemex Gas y Petroquímica Básicas, ha adjudicado a FCC Aqualia las obras de modernización de la toma en el río Mezcalpa, en el estado de Tabasco (México). El proyecto, por valor de 15 millones de euros, incluye la modernización integral de las instalaciones mecánicas, eléctricas y de automatización como el control, para la captación y elevación del agua con una capacidad instalada de 3,6 m3/seg, además de la mejora de las obras civiles.
FCC Aqualia ha sido también elegida por la chilena Codelco para realizar el proyecto de tratamiento de aguas subterráneas mediante una planta de nanofiltración para la barrera hidráulica de Ovejería, en Huechún, Región Metropolitana (Chile).
El proyecto, por importe de 12 millones de euros, consistirá en la ingeniería, construcción y puesta en marcha, así como la operación y mantenimiento, durante un periodo de 12 años, de la planta de nanofiltración con una capacidad de producción de 100 litros por segundo. Con el fin de asegurar la inyección de agua de calidad garantizada con un bajo contenido de sales disueltas.
Por último, FCC Aqualia construirá una nueva depuradora en Cadellada, al norte de Santiago de Chile. La nueva planta, con una capacidad de tratamiento de 330 litros por segundo, cubrirá las necesidades de unos 150.000 habitantes, beneficiando a las comunidades de Colina y Batuco.
El proyecto llave en mano, está valorado en 15 millones de euros e incluye el diseño, equipamiento, construcción, puesta en marcha y operación transitoria a desarrollar durante año y medio. Posteriormente, la compañía se encargará de la asistencia a la operación por un año más.